Hola, compañero.
¿Tienes un jugador que se queja de que el gimnasio “le cansa”, le vuelve “lento, o incluso “le lesiona”? 😅
No estás solo.
🔍 Lo que ese jugador te está diciendo no es “odio entrenar”, sino:
«No veo cómo esto me ayuda a lo que realmente me importa.»
Estrategia: Persuasión antes que imposición.
Convencer antes que imponer.
💡 ¿Qué quiere el jugador? ¿Más minutos? ¿Menos lesiones? ¿Meter más puntos? ¿Ganar más?
Tienes que vincular el entrenamiento con sus metas personales, aunque sean egoistas, aunque creas que no es lo ideal.
📈 Luego, construye credibilidad:
- Usa datos.
- Cita a referentes (¿Sabías que LeBron invierte 1,5 millones al año en su físico?)
- Crea micro-éxitos inmediatos con sesiones específicas como tapering o PAP. Es decir, que no tenga que esperar mucho para ver mejoras (no va a tener paciencia), sino que debes hacer que la causa-efecto sea muy fácilmente identificable.
Y si aún así no cede…
Plan B: Programa de mínimos → preventivo, individual, no debatible. Ya hablado con el entrenador. Y que si se niegue, ya esté pautada la represalia con el head coach.
Ser buen PF no es solo saber sobre teoría del entrenamiento, también debes saber manejar grupos, tener carácter y aprender de la experiencia y los errores de otros compañeros.
Te animamos a que escuches nuestros podcast, en poco tiempo intentamos darte información útil para tu día a día 🙂👂
Un abrazo,
Álvaro y Jaime.