Hola, compañero.
¿No te ha ocurrido alguna vez que en la sesión de fuerza nada funcionaba?
Los jugadores coincidían en el mismo ejercicio.
Había poco ritmo y los jugadores se distraían y se ponían a hablar…
Cuando entramos en el gimnasio, solo una parte del éxito de la sesión depende de tus conocimientos técnicos, de tu dominio de la teoría del entrenamiento.
Otra parte depende de cómo seas capaz de organizar la sesión en cuanto a logística.
De cuanto “flow” tenga la sesión.
De cómo manejes los tiempos y espacios.
Por eso, vamos a darte algunas ideas:
- Organiza la sesión por grupos:
Puede ser por quintetos en pista, mientras el otro quinteto está trabajando con los entrenadores en pista, y tú en el gimnasio con el quinteto complementario.
O puede ser por posiciones (interiores y exteriores, por ejemplo).
También podría ser por puntos débiles, preventivos, etc.
El fin es el mismo: menos jugadores en el gimnasio, menos distracción, más atención y supervisión.
- Si tienes a todos los jugadores, es interesante que los dividas en grupos de 2 o 3 jugadores, con características similares, que requieran similares estímulos. Y que no se muevan de esos 2-3 ejercicios hasta que los terminen. Definiendo muy claramente la rotación.
- Y la forma que más me gusta, haz sesiones individuales y personalizadas. No solo a nivel de estar 1 a 1 (que es una gran opción para tener máxima calidad). Sino también sesiones grupales, pero que cada jugador tenga su sesión.
Cada jugador recibirá justo lo que necesita, y el orden de los ejercicios está puesto de tal forma que nunca coinciden más de 2 jugadores en el mismo ejercicio, y así hay fluidez en la sesión.
No se hace sopa para todos, pero hay flow y ritmo, y todo el mundo está conectado y trabajando.
Ahora es tu turno, cuéntanos cómo organizas tú las sesiones.
Responde a este correo, y así podremos darte nuestra opinión y nuestro feedback 🙂
Un abrazo,
Álvaro y Jaime.